No somos los únicos. Aunque suena absurdo, algunos animales también tienen la fortuna de tener increíbles abuelas. Por ejemplo, los elefantes las ballenas y los primates.
En el caso específico de los elefantes, las abuelas son muy importantes.
Usualmente, estos animales viven en grandes familias en donde los bebés, los jóvenes y las hembras son guiadas por las elefantas más viejas, quienes a menudo cumplen un papel social fundamental.
La apasionada profesora Phyllis Lee descubrió varios datos interesantes. Para lograrlo, evaluó la información sobre muchos elefantes, casi 800.
Lo que hizo es recolectar los estudios que varios investigadores realizaron en más de 20 años el parque nacional Amboseli en Kenia, África.
Lee logró descubrir que, a diferencia de otros animales, los elefantes pueden vivir hasta 70 años, lo que significa que muchas veces pueden ver a los hijos de sus hijos.
Uno de los hallazgos más importantes, es el saber que una abuela elefanta crea lazos muy fuertes con sus nietos.
Usualmente, en el reino animal, el ser abuelo no significa que el animal adulto desarrollará una conexión especial con sus nietos.
De hecho, en muchas especies, una madre y una abuela pueden llegar a pelear por recursos. Sin embargo, para los elefantes este asunto es muy distinto.
Lee asegura que las elefantas son sumamente tiernas y representan un gran apoyo para la familia, cosa que no sucede con los abuelos, quienes al llegar a la pubertad, dejan la familia; y aunque viven lo suficiente para conocer a sus nietos, no cumplen con ese rol.
Tal vez los elefantes no “llenan de dulces a sus nietos”, pero sí los protegen, los vigilan y los ayudan si están en problemas.
Las elefantas son una especie de jefe y están encargadas de guiar a la familia hacia los lugares indicados para conseguir agua e interactuar con otras familias.
Es increíble el instinto, conocimiento y sabiduría que vive en estos animales. Sin duda un gran ejemplo incluso para el ser humano.
Y tú… ¿sabías esto?
What do you think?