Los primeros registros que se tienen de algo parecido a la corbata son de 1660 cuando un regimiento croata fue a ver a su majestad Luis XIV.
Este grupo de hombres se presentaba como héroes y llegaron a París con unos pañuelos de colores atados al cuello.
Dichos pañuelos parece ser que provienen de los oradores romanos que los usaban para cuidar y calentar sus cuerdas vocales.
A Luis XIV le gustaron tanto, que mandó hacer unos pañuelos con la insignia real y bautizó la prenda como “crabete”, que significa “croata”.
Rápidamente la idea (moda) se extendió por Europa e incluso llego hasta Inglaterra y cada quién los usaba como quería.
De este modo, las primeras corbatas no tenían una forma ni material específico. No fue hasta el siglo XX cuando se empezaron a fabricar en masa y a adquirir una estética especial.
En ese entonces muchos predecían la extinción de la corbata por no ser una prenda útil.
Como sabemos hoy, estaban equivocados
La corbata adquirió en ese tiempo y sigue manteniendo un valor estético que realza el uso de la camisa y destaca la verticalidad del cuerpo.
La corbata añade elegancia, estilo, color y textura a la simple camisa y hoy en día es indispensable para vestir formalmente.
¿Quién diría que todo empezó por el gusto de un rey?
What do you think?