Sería sorprendente saber cuántos matrimonios por interés existen… aunque resultaría muy difícil hacer una estadística real, ya que muchas veces ni la pareja del interesado lo sabe.
Lo que sí es un hecho es que no todas las personas se casan únicamente por amor; son muchísimos los factores e intereses por los que una pareja puede decidir unirse.
Seguramente has pensado y escuchado la típica frase: “Se casó por dinero”… Y no necesariamente los intereses siempre serán por una buena posición económica, sino que pueden ser por otras circunstancias: alguna sociedad de negocio, por un hijo, por soledad, “status”social, intereses familiares, adquirir la nacionalidad deseada… por mencionar algunos ejemplos.
La clave está en que si el matrimonio se realiza por un simple interés, sería importante que las 2 partes de la relación estén en común acuerdo. De no ser así, el problema viene cuando las expectativas y los objetivos iniciales fueron totalmente diferentes.
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