Internet está lleno de páginas que sugieren remedios caseros que prometen evitar la caída del cabello.
Uno de los más populares es licuar ajos, cebollas y unas gotas de limón y agua, frotar la mezcla en la cabeza y dejar durante la noche.
No hay evidencia científica que dé la razón a este tipo de remedios, porque lo único que se logra en la mayoría de los casos es oler mal toda la noche.
También hay quienes creen que estar 5 minutos con los pies en alto, aumenta la sangre en el área de la cabeza y ayuda a retener el cabello que aún no se cayó.
La verdad es que si estos remedios fueran tan efectivos como dicen, habría menos calvos. Posiblemente algunos remedios sólo retrasen un poco la caída del cabello, pero no quita el problema.
Lo que sí puede funcionar
Para tratar la calvicie, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) aprobó una loción cosmética llamada Minoxidil.
Si se aplica 2 veces al día en ciertas zonas de la cabeza, mejorará la circulación hacia los pequeños espacios donde nace cada cabello, lo que puede parar la pérdida de pelo.
Funciona realmente a los pocos meses si se usa con continuidad. Para aquellos que sufran alopecia, los médicos recomiendan las pastillas Propecia, otro tratamiento única y exclusivamente para hombres.
Si el pelo se cae por razones de estrés, quimioterapias u otros cambios hormonales, lo mejor es ir al dermatólogo, que diagnosticará si tu problema tiene solución, y te dará el tratamiento correcto.
Pero si de plano los tratamientos no funcionan, la resignación se convertirá en tu mejor amiga, aunque también puedes optar por los implantes.
Debes tener mucho cuidado si piensas aplicar alguno de estos remedios caseros, es mejor investigar un poco…
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