La primer pregunta que debes hacerte es: si tienes amigos. Si los tienes, es probable que no tengas un problema para encontrar pareja pues claramente, ya has logrado formar algún vínculo afectivo.
Y si no tienes amigos, es probable que tampoco tengas un problema para encontrar pareja, por que en realidad tu dificultad puede radicar en construir vínculos afectivos.
VIDA | ¿Por qué me cuesta encontrar pareja? Por @BerStamateas https://t.co/yGCETtpy2r pic.twitter.com/FNnaRmjdjl
— El Tribuno (@eltribuno) 20 de marzo de 2017
Hay 3 tipos de personas con las que no conviene formar pareja.
El que se victimiza
Es quien todo el tiempo dice que sufrió mucho, que fue maltratado, que sus anteriores parejas no lo entendieron, etc. Es esa persona que para nada es responsable de nada en la vida.
Este comportamiento lleva a la pareja de esa persona a activar un sentimiento paternal o maternal y actúan como que con ella o él no le pasará nada y que lo (la) cuidará.
El mete culpa
Quien reprocha lo que dejó y sacrifico por el otro. Alguien que le hace ver continuamente a su pareja que está en deuda, le debe algo y le debe pagar.
Generalmente se transforma en una deuda eterna que nunca se termina de saldar.
El amor no es toma y dame. El amor es dar sin esperar nada a cambio más que reciprocidad por el sentimiento.
El Instalador de vínculos de temor
Es esa persona que marca y resalta siempre lo que su pareja no puede y él (ella) sí puede lograr, alcanzar, tener o hacer.
Esa persona que te dice que “lo has hecho mal” y que él (ella) sabe cómo se hacen las cosas correctamente y te dirá cómo es.
Es decir, tú sólo no puedes y dependes de esa persona.
Una pareja sana es una pareja simétrica, en donde ambos se respetan, en donde el amor es recíproco y en donde ambos en la pareja dan sin esperar nada a cambio.
Al final, la mejor relación es la que logra construir lo que son los dos, para armar el “cerebro de pareja”.
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